En la página 3 y bajo el editorial, nuestro Ayuntamiento se vanagloria en la revista municipal de haber puesto solución a algo que los vecinos le habían pedido reiteradamente y que como última solución decidieron denunciarlo en éstas páginas que a todos han de servir, pues bien, dicha denuncia se publicó aquí el día 1 de julio de 2.008, lo que al parecer debió surtir algún efecto en nuestros dirigentes (no esperamos menos de ellos) que dentro de sus posibles optaron por poner solución ante la justeza de la petición.
Recordemos que se hablaba sobre todo de los ruidos y las noches de cristales rotos en las pistas sin hacer mención a la calle (a petición de los vecinos) ni mostrar en fotografía cual era el verdadero estado de las mismas para NO INCOMODAR dado que se estaba en negociaciones para su arreglado a los responsables del mismo.
Hoy no tienen por menos los vecinos de la zona que elevar nuevamente la voz desde este lugar y mostrar a todos cual ha sido el verdadero arreglo del que se vanaglorian las autoridades en la revista municipal.
Más que arreglo (dicen nuestros vecinos) se ha tratado de un refuerzo y alzado de altura sobre las pistas menos problemáticas, la de baloncesto que no precisaba arreglo alguno ya que de ahí no salían balones y estaba bien y la menos deteriorada de las dos de fútbol, haciendo caso omiso de la que peores condiciones tenía y más daño causa y de todas en los frentes que no dan a las casas de la barriada.
Estos arreglos llevaron a nuestros gobernantes una sola mañana y no quisieron perder media más en terminar los arreglos. Con ello no se ha mermado ni un ápice el rompimiento de cristales, espejos de los coches y los gritos y escandaleras a altas horas de la noche.
Esperamos una pronta, rápida y total solución en los arreglos de las pistas ya que ellos los dan por acabados y exigimos, que ya que se han aumentado las fuerzas de orden municipal obliguen a éstas a dar alguna ronda a ciertas horas por el lugar para evitarnos conflictos a los vecinos con los jugadores (adultos ya a esas horas) y tomen la costumbre de una vez de acabar lo comenzado ya que su principal obligación está en salvaguardar los derechos y la seguridad de los ciudadanos entre los que está el derecho al descanso y el respeto a sus pertenencias.
Las medias verdades, acaban en completas mentiras.
